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Mesa de cultivo para el huerto urbano

Bienvenido un día más al blog de Huerto Urbano, en la nueva entrada de hoy hablaremos sobre qué es y cómo podemos utilizar una mesa de cultivo para llevar a cabo un huerto urbano. Un huerto urbano siempre supone una experiencia que nos aporta multitud de beneficios, tanto a nuestra vida como a nuestro entorno.

Normalmente, si queremos disponer de un huerto urbano es porque no disponemos de un gran jardín o terraza para cultivar directamente sobre tierra. De esta forma, para nuestros casos, podemos encontrar soluciones tan eficaces como las mesas de cultivo.

¿Qué es una mesa de cultivo?

Las mesas de cultivo suelen ser de madera o metal y están especialmente diseñadas para instalar sobre ellas las plantaciones que queremos tener en nuestro huerto urbano. Esta mesa se puede instalar en cualquier lugar exterior que creamos conveniente, tanto puede ser el balcón como en la parte exterior de una ventana.

La gran ventaja de este tipo de mesas es que nos permite disponer de un huerto urbano en cualquier tipo de vivienda. Además, existe infinidad de modelos distintos de mesas de cultivo, por lo que seguro que podemos encontrar la que más se adapte a las dimensiones y necesidades de nuestra vivienda.

Para escoger las dimensiones y material de nuestra mesa de cultivo debemos tener en cuenta cómo queremos que sea nuestro huerto urbano y la variedad de frutas, verduras y hortalizas que plantaremos en él.

¿Qué plantar en una mesa de cultivo?

Lo primero que debemos plantar en nuestro nuevo huerto urbano es una tomatera. Existe una gran variedad de tomates por lo que debemos escoger uno que no necesite ser entutorado por ser de mata baja. También podemos utilizar abono especial para potenciar el crecimiento y el sabor de los tomates de nuestro huerto urbano.

Además de tomates, también podemos plantar lechugas en nuestro huerto urbano. De esta hortaliza también podemos encontrar distintas variedades, podemos escoger una u otra dependiendo de nuestros gustos, al fin y al cabo, nosotros serremos los consumidores de las frutas, verduras y hortalizas que crezcan en nuestro huerto urbano.

Además de plantar este tipo de alimentos, también podemos aprovechar nuestro huerto urbano para cultivar plantas aromáticas. Podemos utilizar estas plantas para nuestro propio beneficio, además nos ayudarán a mantener alejados los insectos y pulgones de nuestros deliciosos productos ecológicos. De esta forma no necesitaremos fungicidas u otros productos para la eliminación de insectos.

Hacer un huerto en casa es muy fácil

Para realizar la actividad de un huerto en casa, lo primero que debemos tener en cuenta es si realmente disponemos de un espacio que podemos destinar a esta actividad. Éste lugar debe cumplir con una serie de requisitos como que reciba luz solar, pueda disponer fácilmente de agua y que sea lo suficientemente grande como para plantar nuestras semillas.

Por otra parte, necesitaremos algunos materiales como tierra, nutrientes y semillas, para que nuestras plantas crezcan correctamente y estén deliciosas para nuestros platos saludables.

Plantar en determinadas épocas del año

Es importante saber en qué época del año podemos plantar nuestras plantas, ya que si lo hacemos en un momento inadecuado, no crecerán como deben ni los podremos comer. En la época de otoño/invierno podemos plantar en el huerto de nuestra casa estos cultivos:

Podemos plantar ajos en zonas cálidas entre octubre y enero, mientras que en zonas frías, de enero a marzo. Para llevar a cabo su plantación debemos colocar los dientes de ajo con la punta que asome por la tierra y hacia arriba. Entre diente y diente debemos dejar una distancia mínima de unos 10 centímetros.

Las berenjenas, por otro lado, son unas plantas muy sensibles al frío, por lo tanto, debemos  y utilizar un semillero protegido entre febrero y marzo con una temperatura de entre 27 y 32°C. Lo mejor para este tipo de plantas es cultivarlas con una distancia de unos 40 a 50 centímetros y no juntarlas con otro tipo de plantas.

Si vivimos en un clima templado, podemos sembrar acelgas en el huerto de nuestra casa durante todo el año. En las zonas frías debemos hacerlo  finales de invierno. Para estos casos, debemos plantar dos o tres semillas juntas y cuando la planta crezca podremos retirar las que no hayan crecido para otra siembra.

La mejor época del año para plantar canónigos es a finales de verano y durante todo el otoño. Si queremos obtener un mejor resultado, antes de plantar las semillas debemos dejarlas en remojo toda la noche anterior.

Finalmente, la plantación de las semillas de escarola se debe realizar entre los meses de enero y febrero. Debemos dejar una distancia de 20 a 25 centímetros entre cada semilla.

Trucos para hacer un huerto en casa

Aunque no es una tarea fácil, tener un huerto en casa es muy gratificante en todos los sentidos, ya que nos aporta momento de relajación después de nuestra larga jornada de trabajo además de comida totalmente ecológica y saludable para consumir en nuestro hogar.

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Lo primero que debemos hacer para realizar esta actividad es encontrar un buen lugar para colocar nuestro huerto en casa. Debe cumplir una serie de características, como ser un lugar soleado, contar con una toma de agua cercana y colocarlo en un lugar que el suelo pueda tener un buen sistema de drenaje.

Una vez hayamos decidido todos estos factores de nuestra nueva actividad, debemos ponernos manos a la obra y reunirnos con todo el material necesario para poder realizar este maravilloso proyecto. Nos aportará pequeños momentos de descanso además de ayudarnos a llevar una vida más saludable y sostenible.

Huerto en casa con materiales reciclados

Si queremos llevar este proyecto de una forma más ecológica podemos utilizar materiales reciclados para realizar nuestro huerto en casa. A continuación daremos una serie de ideas que pueden resultar muy originales:

Las cajoneras y armarios viejos que podamos tener por nuestra vivienda pueden servir para realizar esta actividad. Si son de madera, no debemos olvidarnos de forrar los cajones con bolsas de plástico antes de introducir la tierra. Además debemos guardar distancia entre la colocación de unos y otros para que la luz penetre en los distintos cajones.

Otra opción es utilizar garrafas y botellas de plástico, gracias al material del que están fabricadas no necesitarán ningún tipo de preparación para crear nuestra actividad. Simplemente debemos llenarlas de tierra y plantar nuestros deliciosos alimentos.

Además de estas ideas, las posibilidades son infinitas, ya que cualquier objeto en desuso se puede convertir en el recipiente perfecto para plantar nuestros cultivos. Solo debemos tener en cuenta el material del que esté fabricado y sus dimensiones.

Dependiendo del espacio del que dispongamos en nuestra vivienda y del tipo que cultivo que querremos plantar, debemos utilizar una u otra opción a la hora de escoger el recipiente.